Cómo librarnos del dinero y su esclavitud

El método más normal que tenemos de librarnos de este sistema tan injusto, es votar a algún partido político que no se haya vendido al capital, pero está visto que la mayoría de la gente prefiere malo conocido que bueno por conocer, así a parte de confiar en la viabilidad del primer método, he pensado en otra alternativa que tenemos de librarnos de la esclavitud a la que nos tienen sometida, olvidándonos totalmente del dinero (ni en metálico, ni electrónico).

En cada transacción comercial, se va una parte importante en forma de impuestos, y parte de esos impuestos los usan en nuestra contra, o los derrochan. Así que sin dinero, no tendrían un modo fácil de controlarnos.

A la mayoría, esto le parece un salto tan grande, que no creen que nos sea posible librarse del dinero. Si lo analizas bien, te das cuenta de que en realidad es mucho más fácil de lo que parece. Es totalmente posible cambiar de un día para otro de un sistema basado en el dinero, a otro sistema en el que no exista dinero, y cada uno trabaje libremente, sin sentirse presionado por la necesidad de ganar dinero.

El único impedimento para este cambio, son los valores que nos ha inculcado el sistema, principalmente por la tele y otros medios de comunicación. Nos han dicho que la única forma de progresar, es la competitividad, y que nos tienen que obligar para que no nos convirtamos en unos gandules que se pasarían el día tumbados sin hacer nada, excepto cuando nos levantemos a robar cualquier cosa que necesitemos o nos apetezca tener.

Buscamos la felicidad compitiendo en mayor o menor grado, con el objetivo de que los demás nos valoren más. El cochazo de lujo, joyas, y demás lujos, más que dar comodidad, dan un mayor estatus social, que es el modo que nos han inculcado para valorar a las personas. Si desconectamos de la tele, y nos guiamos por nuestros instintos, nos damos cuenta de que el verdadero valor de las personas reside en su cooperación con los demás, ayudando al que lo necesita. De este modo valoramos más a los que más nos ayudan, en vez de a los que más nos roban, que es lo que ocurre en la actualidad, cuando en los grandes medios, nos presentan a los ricos que viven a nuestra costa como modelo a seguir. Así que para empezar, tira la tele, o regalasela a tu peor enemigo.

Lo más fácil es imaginarse un mundo en el que solo nos dedicáramos a tareas asequibles a pequeñas comunidades, como la agricultura, y la artesanía, pero en realidad no es imprescindible experimentar un retroceso tecnológico. Por ejemplo, podríamos seguir teniendo teléfono e internet, porque aunque dejemos de pagarlo, la infraestructura seguirá ahí, solo que dejará de pertenecer a una empresa privada. Los trabajadores que se ocupaban de mantener la red, pueden seguir manteniéndola sin que les paguen. Por supuesto que la mayoría no tendrá ganas de trabajar por gusto tantas horas al día, pero parte de su trabajo lo podrán realizar otras personas que antes trabajaban en tareas que ya no serían necesarias, como el ejército, publicidad, banca, asesores, funcionarios de tareas burocráticas, etc. La gente seguiría trabajando, solo que muchas menos horas al dia, y sin tener obligación de hacerlo, solo por la responsabilidad que se siente al saber que el bienestar de los demás también depende de tí, y que los demás igualmente se preocupan por tí..

El sector energético experimentaría una gran revolución, ya que al desaparecer los magnates energéticos, no habría nadie suprimiendo todos los inventos del último siglo para aprovechar las energías renovables a un coste muchísimo menor al que actualmente pagamos. Esos inventores trabajaron por el bien de la humanidad, y la mayoría se arruinaron cuando les impidieron sacar su producto al mercado. Es un ejemplo más que derrumba el falso mito de que la única motivación para trabajar sea el ánimo de lucro, y demuestra que el dinero impide el libre desarrollo de la humanidad.

Como los medios de comunicación pasarían a estar controlados por el pueblo, cada vez que se detectara una carencia en algún sector de la economía, se informaría a la población, para que acudiera gente a ayudar. Aunque solo sea por puro egoismo, si quieres seguir disfrutando de algún servicio o producto, tienes que ayudar en su producción.

Igualmente, las fábricas de productos muy especializados, podrían seguir produciendo, y repartiendo sus productos de forma equitativa por todo el mundo. A cambio ellos recibirían todo lo que necesitaran de otros paises. Ya no estaría bien visto el lucir lujos, y mucho menos el aprovecharse de que los productos sean gratis para acapararlo todo, así que serían los propios vecinos los que impedirían que nadie se aprovechara acaparándolo todo, y no sería necesario que el fabricante del producto controlara quien se queda con ellos.

Se acabaría con la necesidad de producir como fin en sí mismo, y se podrían diseñar los productos para que fueran muy duraderos, a diferencia de lo que ocurre actualmente, que tienen que hacerlos de modo que se rompan pronto, o se queden antígüos, para poder seguir vendiendo más.

Se acabaría con la hegemonía de los coches tal y como los conocemos hoy en dia. El sistema de transportes podría ser completamente rediseñado de forma inteligente, algo imposible con el monopolio de los fabricantes de coches, que perderían casi todos sus ingresos.

Sin dinero no serían posibles los injustos intercambios comerciales por los que trabajadores de paises más pobres trabajen por 1 euro al día. La unidad de referencia para orientarse en lo que debe ser un intercambio justo, debe estar basada en el tiempo de trabajo total, incluyendo el tiempo que costó obtener las materias primas, y fabricar la maquinaria e instalaciones necesarias para procesarlo.

A los únicos que les debe molestar el cambio, es a los ricos, que son minoría, y en ese caso su dinero carecería de valor, y sus propiedades serían de todos, por lo tanto dejarían de tener poder para forzarnos a hacer lo correcto. El mayor problema podría venir de las promesas de grandes recompensas que hicieran los ricos a las fuerzas de seguridad para forzarnos a hacer lo que quieran, pero si somos una gran mayoría, los policías no se atreverían a actuar contra el pueblo.

Hay muchos detalles en este cambio que no he tenido en cuenta, y no digo que sea fácil. Seguro que es necesario resolver muchos problemas que pueden surgir, aunque merece la pena el esfuerzo. La libertad de la humanidad solo depende de tí. Si esto te parece una buena idea, compártela con los demás, y si a los demás también les parece una buena idea, solo hay que poner una fecha para dar el salto.
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Fin del manifiesto.
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Esto solo es un borrador de lo que podría ser el mensaje que habría que transmitir a todo el mundo para que se dieran cuenta de que un mundo mejor está al alcance de nuestras manos. La idea la tomé de la sugerencia que hizo Alex Collier, y después de estar pensándolo durante dias, lo veo totalmente al alcannce de nuestra mano.

Se podría escribir un libro sobre el tema, aunque antes de nada, veo más importante un breve texto que pudiera convencer a mucha gente. Si os gusta la idea, podríamos mejorar el texto entre todos (o modificarlo totalmente), de forma que pudiera convencer a la gente "normal".

Lo único malo que veo, es que los que están en paro, y otra gente muy desfavorecida puede que les guste la idea, pero al que está más acomodado en el sistema es dificil hacer que de un salto grande. En el peor de los casos serviría para que la gente conociera otra alternativa, y cuando las cosas se pongan peor todavía, a lo mejor un dia se acuerdan de la idea, y se deciden a ponerla en práctica.

Un saludo, o los que hagan falta.